Estrés y límite laboral

No cabe duda que el teletrabajo ha revolucionado la manera en la que los colaboradores pueden agregar su cuota de valor al el desarrollo de la organización, y no solamente en el ámbito del aporte corporativo del que son responsables, sino también, podemos afirmar que dicha revolución ha alcanzado niveles de influencia sobre ciertos beneficios psicológicos que empleados afirmar manifestar al ser removido de su día a día algunas actividades como: el tiempo de traslado al lugar de trabajo, la exigencia de vestimenta formal requerida en la mayoría de las empresas, y en ocasiones la exposición misma a colaboradores que innecesariamente incrementan el estrés laboral. Sin embargo no todo es color de rosa.

En muchos casos se ponen de manifiesto los mismos factores estresantes, indistintamente si el empleado se encuentra en la oficina, en su hogar o desde un espacio de trabajo flexible.

Aunque estamos de acuerdo que en el aspecto del bienestar laboral se ha logrado mucho en comparación con otras generaciones anteriores que afrontaron la cultura laboral propia de sus tiempos. Hoy en día es de suma importancia para la salud mental cuidar el tiempo que se dispone para dedicarse a sí mismo, y se trata de un tema tan esencial que es necesario para poder tener colaboradores dispuestos a dar la milla extra y conseguir esos resultados deseados que cualquier empresa contemporánea exige.

Y solo por señalar uno de los catalizadores generales del estrés: el horario laboral no definido. Del que siempre es recomendable tener bien claro cuales son las expectativas de la empresa respecto a este tema y que el empleado enfatice su disposición del tiempo con sus límites bien definidos. Para así evitar futuras situaciones poco agradables para ambos, empleado e institución.

Normalmente el estrés laboral se puede definir como la presión excesiva que se recibe de manera constante en el lugar trabajo. Aunque se debe admitir que con los acontecimientos recientes (la pandemia) los factores estresantes se han trasladado hasta la privacidad hogar. Lugar que debería ser el templo donde se regresa luego de una jornada para encontrar paz y recargar esa energía para el día siguiente.

Aunque muchas empresas han adoptado la cultura del trabajo híbrido que brinda la oportunidad de elegir los días que se labora en casa, desde el coworking o desde la oficina.

Aun así existen las que no definen el límite del horario laboral y en ocasiones se viola el tiempo personal por lo tanto en vez de el empleado dedicarlo a su familia, a esparcimiento o a desarrollo personal, termina continuando la jornada de trabajo fuera de su horario como si el día no hubiese concluido. Acción que no solo produce estrés, sino también fatiga física y mental que puede traducirse en baja eficiencia, malestar en los colaboradores de la empresa y resultando a su vez en un alto índice de rotación para la empresa que debe mitigar baja productividad.

Diversas son las causas que dan origen a la existencia del estrés ocupacional y algunas de las más comunes son: la carga excesiva de trabajo, que se trata del incremento de las responsabilidades sobre un solo colaborador que debe afrontarlas en muchas ocasiones sin las herramientas ni el entrenamiento adecuado, pero se le exige las mismas metas.

También tenemos las deficiencia de relaciones interdepartamentales, que generan crisis en el flujo de información asertiva entre órganos institucionales, unidades o departamentos. Y dan como resultado la pérdida de oportunidades y pérdida de dinero.

Y no menos importante tenemos también las condiciones inadecuadas en las instalaciones donde se deben realizar las labores, porque de no poseer condiciones mínimamente favorables para la ejecución de las responsabilidades el resultado siempre será la desmotivación y la ineficiencia.

Ahora bien, para concluir sin pesimismos, les puedo asegurar que sí es posible, se puede tener un equilibrio entre lo laboral y lo personal pero es una responsabilidad de ambas partes el ser conscientes de los factores causantes del estrés y saber negociar el balance laboral. Es necesario tener bien claro las consecuencias del estrés laboral en la organización para una mejor salud mental de los colaboradores.

Así que con optimismo y mente positiva afrontemos los desafíos de la vida laboral contemporánea y a los dueños de empresas aporten un grano de arena e intenten optimizar esa carga de la que sé que muchos de los lectores de este artículo están siendo afectados en silencio.

Tengan un feliz día.

Autor:
Jonathan Mateo
Consultor de Reclutamiento y Cultura Laboral